La asociación Recal asume la gestión de la perrera de Almendralejo

El Ayuntamiento ha formalizado la relación que tiene con la asociación sin ánimo de lucro Refugio Canino de Almendralejo (Recal) desde hace dos décadas para la gestión conjunta de la perrera municipal y para ello ha firmado un convenio. Con este acuerdo, que tiene una vigencia de cuatro años y que ya ha sido aprobado en pleno, Recal asume toda la gestión, pero el Consistorio sufragará los gastos económicos que se deriven de la misma.

El convenio fija las bases de colaboración que permiten el uso de las instalaciones destinadas a Centro Municipal de Protección Animal para la acogida, tenencia, cuidado y adopción de animales extraviados, abandonados o necesitados. En estos momentos hay 228 animales recogidos, de los que 115 son perros y 113 son gatos, según apuntó la presidenta, Noelia Hermoso, durante la presentación del convenio.

El Ayuntamiento seguirá colaborando económicamente, a través de una subvención anual nominativa de 30.000 euros con Recal, aunque se compromete a incrementar esa cantidad si fuera necesario.

A cambio, Recal asume todos los gastos veterinarios y de la alimentación de los animales, así como el mantenimiento, y se hace cargo de la limpieza de las instalaciones, que hasta ahora llevaba a cabo un operario contratado por el Consistorio.

Ese dinero irá destinado a los costes de la gestión de las instalaciones, programas de adopción y tratamientos zoosanitarios que lleve a cabo la asociación, así como cualquier otro gasto subvencionable.

El alcalde, José María Ramírez, quiso estar presente en la firma del convenio para expresar su respaldo a Recal por el trabajo que realiza desde hace 24 años. Como novedad, dentro de la web del Ayuntamiento existirá un vínculo con la página de Recal y el blog de la asociación, mostrando el correo electrónico de la misma, el teléfono y otros datos de interés.

También se publicará la ubicación de la perrera en los planos y mapas que edite el Ayuntamiento y se instalará la señalización para su correcta localización.

La edil de la Perrera Municipal, Juliana Estela Megías, apuntó que este convenio es fruto de un trabajo conjunto que les ha llevado mucho tiempo y que ha sido necesaria la contratación de un veterinario para que supervisase las condiciones.

También señaló que el Consistorio seguirá financiando los costes del lacero para que un operario municipal siga haciendo labores de recogida de animales abandonados.

Además, anunció el compromiso de que en el plazo máximo de seis meses se aprobará un reglamento de régimen interior de funcionamiento del servicio y del Centro Municipal de Protección Animal, en el que se establecerán las condiciones de permanencia de los animales, el trato y la actividad que desarrollará el personal para la adecuada alimentación de los canes y gatos, la vigilancia y control para el aseo y la detección heridas y enfermedades.

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