La Junta y Cruz Roja quieren fomentar la acogida de menores en familias antes que en centros

Así lo ha señalado el consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, que ha presentado esta iniciativa junto al presidente regional de Cruz Roja, Jesús Palo. También ha estado presente Nieves de la Encarnación Avilés, que ha contado su experiencia como menor en acogida.

Vergeles ha explicado que hay 17 familias de acogida de niños en la región, de ellas 15 ya en activo y dos en la fase de espera, y que se trabaja en la evaluación de los 320 niños que están en centros para que, en la medida de lo posible, se integren en nuevos núcleos familiares.

Ha reconocido que el acogimiento con más éxito es el de la familia extensa, que cuenta con 247 acogimientos.

El objetivo fundamental es "cumplir el derecho de los niños a vivir en familia" y, si es posible, que vuelvan con las biológicas.

Según el consejero, hay argumentos para llevar a cabo esta medida ya que es preciso proteger a los menores de edad que, por diversas circunstancias, no pueden vivir con sus padres y están en una situación de vulnerabilidad. Asimismo, también hay razones científicas porque, ha continuado, se ha comprobado que el desarrollo de los niños es mejor en el seno de una familia en áreas como la inteligencia, la cultura y la psicomotricidad. Además, es preciso evitar "el desarraigo" que puedan sufrir en los centros a pesar de la profesionalidad de sus trabajadores.

Entre las modalidades de acogimiento familiar figuran la "de urgencia", principalmente para niños de menos de seis y hasta seis meses en tanto se decides las medidas de protección; y la temporal, que es transitoria durante dos años como máximo bien porque se prevea el retorno con los padres biológicos o de determine alguna medida más estable como la acogida permanente o la adopción.

La permanente comienza cuando acaba la temporal si no es posible reintegración familiar, cuando se trata de niños con necesidades especiales o cuando las circunstancias de los menores y de sus familias lo aconsejen; y la especial, la destinada a los niños con necesidades especiales o mayores, y a los grupos de hermanos.